¿Quieres que este año sea diferente y ahora sí cumplir tus propósitos de año nuevo?
«Hacer ejercicio»
«Bajar de peso»
«Viajar»
«Ahorrar»
En este artículo te comparto 6 pasos que te ayudarán a cumplir todo lo que te propongas este nuevo año.
1. Tus propósitos de año no son sueños, son METAS
Cuando fijes tus propósitos debes plantearlos como metas y no como sueños.
La diferencia entre un sueño y una meta es que un sueño es simplemente algo que te gustaría que pasara, mientras que una meta es un objetivo que estás determinado a alcanzar con trabajo y esfuerzo.
Si te planteas sueños lo que sucederá es que pasarás el año esperando algo que nunca va a llegar. En cambio, al fijarte metas pasas a tomar el control de la situación y tomas acción para alcanzarlas.
2. Sé específico
Si tus propósitos de año son ambiguos, como «viajar más» o «ganar más dinero», podría decirse que estás planteando sueños y no metas, ya que no estás dejando claro un objetivo ni un plan de acción.
Tus propósitos de año deben de ser específicos. Pregúntate cómo, dónde, cuándo y cuánto al momento de fijarlos. De otro modo no podrás cumplirlos simplemente porque no conocerás realmente lo que quieres lograr.
Si no sabes a dónde quieres ir nunca llegarás a tu destino. Es así como funciona.
Al ser específico sabrás exactamente lo que buscas, lo que te ayudará trazar un plan de acción que te encamine a alcanzar tu meta. De otra manera te perderás en el camino realizando acciones aisladas que no te llevarán a ningún lado.
Sé específico cuando fijes tus propósitos de año. Esto te ayudará a tratarlos como verdaderas metas y a dar dirección a tus acciones.
3. Cuantifica tus metas
Continuando con el punto anterior, toda meta que te propongas debe de ser cuantificable. O en otras palabras, se debe de poder medir.
‘Hacer más ejercicio’ no es una meta que puedas medir, ya que no específicas a que te refieres por ‘hacer más’. En cambio ‘ir al gimnasio 4 veces por semana’ se puede medir fácilmente.
Al cuantificar tus metas tienes la capacidad de medir tu desempeño y saber si las estás cumpliendo o no.
En el caso de que uno de tus propósitos de año sea ahorrar, pregúntate cuánto puedes ahorrar mensualmente o cuánto te gustaría ahorrar a final del año.
Analiza tus metas y encuentra la manera de que puedas medirlas. Es importante que las plantees de esta manera, ya que así podrás verificar de que las estés cumpliendo.
4. Piensa en grande
Al momento de fijar tus metas ten en mente que tu esfuerzo y dedicación será proporcional al tamaño de tu meta. Esto quiere decir que debes fijar metas grandes que te motiven a trabajar duro y sacar lo mejor de ti.
Si tus metas son pequeñas no te esforzarás por alcanzarlas ya que no verás un beneficio si lo haces. En cambio, si tu meta es grande, estarás dispuesto a dar un extra y trabajar más de lo habitual puesto que la recompensa será mucho mayor.
Al fijarnos metas grandes nos forzamos a salir de nuestra zona de confort, a trabajar más duro, a ser más creativos y encontrar nuevas formas de alcanzar lo que nos proponemos.
Cuando fijes tus metas piensa en grande y no te limites. No conocerás tu verdadero potencial si no te pones a prueba.
5. Fija metas a corto y mediano plazo
Si bien tu meta final debe ser grande, es importante que fijes metas más pequeñas que puedas alcanzar en un corto y mediano plazo.
Estas metas intermedias son muy importantes ya que cumplen varias funciones:
-
Ayudan a que avancemos gradualmente hasta llegar a nuestra meta.
-
Nos mantienen motivados.
-
Sirven para medir nuestro progreso.
¿Qué quiere decir esto?
Imagina que nunca antes has practicado atletismo y uno de tus propósitos de año es correr un maratón (42 kilómetros).
Si intentas correrlo sin preparación previa, lo más seguro es que a los pocos kilómetros tu cuerpo no pueda más y termines retirándote de la carrera.
Pero qué pasa si mejor te fijas como meta correr primero 1 kilómetro, y una vez que tu cuerpo se sienta cómodo corriendo esta distancia subir gradualmente tus metas a 5km, 10km, hasta llegar a los 42 kilómetros del maratón.
De esta manera gracias a tus metas a corto y mediano plazo tu cuerpo se va a ir adaptando y podrás correr mayores distancias, lo que eventualmente te llevará a poder correr el maratón.
Por ello es importante que fijes metas a corto y mediano plazo, ya que te ayudan a no desesperarte y a mantenerte enfocado. Cada que alcanzas una de estas metas es como recibir una inyección de motivación que te ayuda a seguir adelante.
6. Fija fechas límite
Toda meta que te fijes debe de tener una fecha límite para cumplirla.
Al determinar una fecha límite creas una sensación de urgencia, la cual te empuja a trabajar en tus metas de manera inmediata.
De esta forma no esperarás «tener tiempo» para comenzar a trabajar. Al contrario, tomarás control de tu tiempo y darás prioridad a tu meta sobre otras actividades.
Deja una respuesta